Andrea Kimi Antonelli, el rookie de 18 años, firmó una pole position inolvidable en su quinta participación en la Fórmula 1. Con un tiempo de 1:26.482, el piloto de Mercedes superó por 45 milésimas a Oscar Piastri (McLaren) y por 100 a Lando Norris, su compañero de equipo. La hazaña no solo marca un hito en su carrera -es el tercer debutante más joven en lograr una pole-, sino que reactiva a Mercedes, que no encabezaba una parrilla desde el GP de Brasil 2022. Toto Wolff, director del equipo, calificó el resultado como «un faro de esperanza» para el proyecto post-Hamilton.
La sesión, celebrada bajo un sol abrasador en el Autódromo Internacional de Miami, combinó estrategias audaces y errores cruciales. Antonelli optó por un único intento en Q3 con neumáticos blandos, mientras rivales como Verstappen (4º) y Russell (5º) acumulaban hasta tres salidas. Su vuelta definitiva, demostró una madurez técnica impropia de su experiencia tras ejecutada en el sector 3 -zona de curvas lentas donde Mercedes sufre históricamente-, en forma impecable.
El equipo de Woking confirmó su racha ascendente con un doblete en la segunda fila. Piastri, líder del campeonato tras su victoria en Arabia Saudí, registró 1:26.527, mientras Norris completó 1:26.582. Sin embargo, la sesión dejó dudas sobre la igualdad interna: Norris perdió 0.3 segundos en la curva 12 por un error de subviraje, según revelaron datos de telemetría.
La polémica surgió en la SQ1, cuando Yuki Tsunoda (Red Bull) acusó a su equipo de sabotaje: «Me dejaron sin tiempo para el último intento». El japonés, eliminado en el puesto 18º, podría presentar un reclamo formal ante la FIA. Por contra, Alexander Albon (Williams) brilló con el octavo tiempo, superado por Leclerc (6º) y Hamilton (7º).
Fernando Alonso logró colar su Aston Martin en la SQ3 (10º) pese a las limitaciones técnicas del AMR25. El coche, inferior en carga aerodinámica y velocidad punta, sufrió especialmente en el sector 2 -donde el asturiano perdió 0.8 segundos frente a Antonelli. Su estrategia: tres salidas en Q2 con neumáticos usados para preservar juegos nuevos, táctica que le permitió superar a Ocon (Alpine) por 128 milésimas.
«Es como pilotar sobre hielo», admitió Alonso tras la sesión, refiriéndose a la falta de agarre lateral del monoplaza. Pese a todo, su posición le da opciones de puntuar en la carrera sprint, donde el caos suele reinar en la recta de meta de 1.2 km.
Carlos Sainz vivió una jornada para el olvido. El madrileño, cuarto en los libres, vio cómo la FIA eliminó su mejor tiempo en la SQ2 por exceder límites de pista en la curva 7. En su intento de recuperación, bloqueó las ruedas en la curva 15, provocando un trompo que lo dejó fuera de la SQ3 (15º). «Necesitamos analizar por qué perdimos el equilibrio del coche», declaró James Vowles, jefe de Williams.
La decepción contrasta con su actuación en 2024, cuando terminó cuarto en Miami. Ahora, deberá remontar desde la octava fila en una pista donde los adelantamientos son complejos.
Max Verstappen (4º) mostró su insatisfacción pese a igualar su mejor posición en clasificaciones sprint de 2025. El neerlandés criticó el RB21 por su falta de consistencia en neumáticos medios: «En la segunda vuelta rápida, el coche vibraba como un tren viejo». Sus datos revelan un problema recurrente en el alerón trasero, que pierde carga aerodinámica tras 2-3 vueltas a máximo ritmo.
Christian Horner, director de Red Bull, atribuyó los problemas al «diseño extremo» del coche para curvas rápidas, que penaliza en circuitos técnicos como Miami.
El Autódromo Internacional de Miami confirmó su reputación como escenario de sorpresas. Sus 19 curvas, combinadas con asfalto resbaladizo y temperaturas de 38°C, castigaron a equipos como Ferrari -Leclerc apenas logró sexto puesto- y Alpine. Los neumáticos C4 (blandos) mostraron degradación prematura, obligando a múltiples paradas en sesiones libres.
La carrera sprint (19 vueltas) promete batallas estratégicas: solo 8 de los 20 pilotos optaron por dos paradas en simulaciones. Antonelli, con ventaja de posición, podría intentar una gestión conservadora de neumáticos, mientras McLaren presionará con su ritmo en sectores mixtos.
La pole de Antonelli inyecta optimismo en un equipo que acumulaba 28 carreras sin victorias. Mercedes introdujo en Miami un nuevo sistema de suspensión frontal para mejorar la estabilidad en frenadas, clave en las curvas 11-14. Los datos muestran que el W16 ganó 0.4 segundos en comparación con el GP de China.
Sin embargo, James Allison, director técnico, advierte: «Una pole no gana campeonatos. Debemos confirmar este rendimiento en la carrera». El desafío inmediato: convertir la velocidad en una victoria sprint, algo que Mercedes no logra desde Brasil 2021. 🏎️🔧
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