Ha pasado una década desde la última vez que el Rally de Nueva Zelanda estuvo integrado por última vez dentro del WRC y desde entonces ha sido seguramente una de las citas que más han echado de menos los aficionados. Aunque la pandemia hizo que la espera se extendiera dos temporadas más, finalmente el país kiwi recibirá de nuevo con los brazos abiertos a los principales pilotos de la especialidad para verlos surfear sus impresionantes caminos de tierra, siendo seguramente uno de los eventos que mayor sensación de fluidez dan.
Pistas de alta velocidad con curvas peraltadas que se entremezclan con algunos cruces muy peligrosos donde será especialmente clave el determinar cuál es el punto correcto para comenzar a frenar. Dejarte algún metro te hará ceder décimas, pasarte te llevará a tocarte contra uno de los muros de tierra que muchas veces escoltan las pistas o, en el peor de los casos, deslizarte por laderas de hierba que pueden significar el abandono definitivo.
Toda la acción se llevará a cabo en la isla norte de Nueva Zelanda, con Auckland como epicentro del rally y con un itinerario que, si bien parece muy contenido, disparará los kilómetros de enlaces especialmente en la jornada del viernes, día en el que la acción se desplaza hacia el sur, concretamente muy cerca de la localidad de Hamilton. Con todo ello, serán en total 17 especiales que sumarán entre todas ellas 279,80 kilómetros, siendo el total finalmente 1.379,97 kilómetros precisamente por ese desplazamiento.
El Rally de Nueva Zelanda ha sido una de las pruebas junto a Argentina que nos ha regalado finales más apretados: tres décimas en 2007 entre Grönholm y Loeb, y 2,4 segundos entre Latvala y Ogier en 2010
Sólo con mucho calor se podría optar por el compuesto duro, pero viendo las previsiones meteorológicas se habla de lluvias prácticamente todos los días desde el jueves, así como temperaturas por debajo de los 20°C. Una vez más se espera que el líder del Mundial esté muy lastrado en la jornada del viernes por la limpieza de los tramos, por lo que, de darse finalmente las precipitaciones anunciadas, puede que Kalle sufra un poco menos abriendo. Aunque es un itinerario relativamente nuevo (la jornada del viernes es calcada a la de 2012, así como el tramo 9/12), Sébastien Ogier, Thierry Neuville y Ott Tänak parte con la ventaja de que al menos han competido allí una vez.
El rally comenzará el jueves por la tarde con una ceremonia de salida en Pukekawa Auckland Domain, seguida inmediatamente por un tramo súper especial de 1,78 km dentro del parque del centro de la ciudad. Después, habrá que acostarse pronto para la reanudación a las 05.45 horas de la mañana siguiente.
La brutal etapa del viernes contará con tramos clásicos en la Costa de Whaanga y en las carreteras de la región de Waikato, cerca de Te Akau. Estos tramos constituyen una etapa inicial muy exigente que comprende más de la mitad de la distancia competitiva del rallye.
Para hacer la vida aún más difícil a los competidores, no habrá oportunidad de asistencia. Sólo un cambio de neumáticos en Raglan divide los dos bucles de Whaanga Coast (29,27 km), Te Akau South (31,02 km) y Te Akau North (18,53 km) durante una jornada incesante de 15 horas.
Los competidores viajarán al norte de la base de rallye de Auckland el sábado para hacer una doble pasada por Kaipara Hills (15,83 km), Puhoi (22,50 km) y Komokoriki (5,81 km). El regreso a Auckland para la asistencia separará los bucles, que añadirán 88,28 km al recorrido total.
La jornada final del domingo incluirá un nuevo tramo en Whitford Forest Te Maraunga Waiho (8,82 km) y el tramo de Jack’s Ridge (6,77 km). Ambos tramos se disputarán dos veces, y el segundo paso por Jack’s Ridge constituirá la especial que reparte puntos extra, el Wolf Power Stage.
Las celebraciones del podio siguen poco después y, si las cosas van a favor de Kalle Rovanperä, podríamos coronar a un nuevo campeón del mundo al final del fin de semana.
En lo referente a la lista de inscritos, tenemos la principal novedad del regreso de Oliver Solberg al equipo Hyundai sustituyendo de nuevo a Dani Sordo tras el Acrópolis, mientras que en Toyota GAZOO Racing, será Sébastien Ogier el que entra en la estructura para reemplazar a Esapekka Lappi hasta el final de la temporada, compitiendo también en España y Japón en busca de su primer triunfo bajo la reglamentación Rally1.
Quizás M-Sport es el equipo que más sorpresas nos tenía reservadas, especialmente porque por segundo rally consecutivo causa baja Adrien Fourmaux, al cual no sólo le está pasando factura su accidente en el final del Rally de Ypres, sino todos sus abandonos a lo largo de la temporada 2022 que nos dejó con dos golpes fuertes como los vividos en Monte-Carlo y Croacia. El francés causará baja y esto hace que sean sólo dos pilotos los que sumen puntos para el equipo con sede en Cumbria ya que Lorenzo Bertelli, la otra gran noticia entre los inscritos no recibirá dicha responsabilidad.