La presentación del Red Bull RB18, la revelación del Ferrari SF-23 era uno de esos días que los aficionados a la Máxima Categoría tenían marcados en su calendario y fiel a la tradición de la escudería más exitosa de la F1. Y, por supuesto, no decepcionaron.
A diferencia del resto de los equipos, Ferrari lanzó el SF-23 en Maranello, con más de 500 aficionados presentes y sacó el auto a dar un par de vueltas en la pista de Fiorano, para deleite de los tifosi, una verdadera muestra de cómo se consiente a tus fans.
“El año pasado tuvimos un gran avance, comparado con 2020 y 2021, por lo que realmente miro adelante con este nuevo coche, creo que hemos hecho un buen trabajo desarrollándolo y corrigiendo las debilidades, creo que será mejor que el del año pasado. El objetivo es ganar, es lo que me motiva a mí y todo el equipo. Estoy deseando subirme al coche y tratar de ganar este campeonato”, afirmó Charles Leclerc, subcampeón mundial en 2022 y quien se encargó de girar con el auto en la histórica pista propiedad de Ferrari.
Para la Scuderia este 2023 será una prueba de fuego, pues estrenará director, el francés Frédéric Vasseur, quien fue nombrado hace unas semanas y tendrá que venir a crear una revolución dentro del equipo italiano, que ha pasado momentos duros durante 2022 con graves errores en la estrategia de la carrera y la fiabilidad del auto.
Además de encontrar la clave para que Charles Leclerc y Carlos Sainz Jr. puedan ir a pelear al tú por tú con los poderosos Red Bull, que por segundo año salen como los favoritos para lograr los títulos, así que tienen mucho trabajo y muy poco tiempo para que inicie la temporada 2023 en menos de tres semanas.
Si bien, Ferrari no pudo lograr la máxima potencia en el auto del año pasado, el diseño de ese monoplaza era lo suficientemente bueno para que la Casa de Maranello mantuviera gran parte del concepto para este 2023 y sólo se enfocara en hacer una evolución del auto rojo, algo que suena fácil, pero requirió de muchos meses de trabajo para lograr el auto que estará durante la temporada de la Fórmula 1 2023.
Uno de los puntos más importantes del trabajo era reducir el peso del auto, para poder tener una mayor velocidad máxima en las rectas y así no perder distancia con Red Bull, además, se trabajó en los materiales y la fiabilidad del motor, que el año pasado dio grandes carreras, pero también muchos dolores de cabeza en cuanto a su durabilidad.
La suspensión fue mejorada en su trabajo, para adaptarse mejor a la nueva gama de neumáticos Pirelli, que serán más rígidos.
Uno de los puntos de diseño que más llamó la atención desde el año pasado fueron los pontones del auto, esos laterales donde se forma una depresión, que tiene como objetivo generar más downforce y que el aire viaje de mejor forma hacia la parte posterior.
Ahora, esa zona presenta un frontal más alto, con lo que también se elevó la posición de las entradas de aire a los radiadores (mismos que redujeron su tamaño). Se observa un mayor tamaño en la zona del piso.
También la toma de aire del motor, colocada sobre el habitáculo, es más pequeña y tiene una forma triangular, que busca beneficiar la aerodinámica y el trabajo del aire en la parte posterior del coche.
La transmisión totalmente nueva, en una carcasa más compacta y con nuevos anclajes, para mejorar su fiabilidad, mejorar el reparto de pesos y reducir el peso.
En esta reducción de peso, también colabora la pintura, que no está presente en todo el monoplaza, sino que se han dejado partes con la fibra de carbono expuesta. El tono de rojo del SF-23 es obra del Ferrari Design y es el mismo tono que tendrá el prototipo de carreras de resistencia 499P Hypercar, que regresará a Ferrari a la división principal del automovilismo de resistencia por primera vez en 50 años.
FOTOS: Ferrari y Federico Basile