Álex Palou está cada vez más cerca de hacer historia en la IndyCar. El piloto español ha logrado su segunda victoria de la temporada en el nuevo circuito urbano de Detroit, donde ha dominado desde la pole position y ha resistido los ataques de sus rivales. Palou ha demostrado que es el más fuerte del campeonato y ha aumentado su ventaja al frente de la clasificación general.
Palou ha liderado 74 de las 100 vueltas de la carrera, que ha estado marcada por las numerosas banderas amarillas y los incidentes. El español ha sabido mantener la calma y la concentración en cada relanzada, y ha controlado el ritmo con su Dallara-Honda del equipo Chip Ganassi Racing. Solo Will Power le ha puesto en apuros, pero el australiano ha perdido la oportunidad de adelantarle tras un toque con Scott Dixon, compañero de Palou.
Power se ha tenido que conformar con la segunda posición, mientras que el tercer puesto ha sido para Felix Rosenqvist, que ha protagonizado una intensa batalla con su compañero de equipo Alexander Rossi. Los dos pilotos de Arrow McLaren se han tocado varias veces, pero han logrado llegar a meta en cuarto y quinto lugar, respectivamente. Dixon ha sido sexto, seguido por Scott McLaughlin, Marcus Armstrong, Marcus Ericsson y Josef Newgarden.
Entre los grandes perjudicados de la carrera han estado Pato O’Ward y Romain Grosjean, que se han estrellado contra el muro cuando rodaban en posiciones de puntos. O’Ward había tenido problemas en una parada en boxes y luego se había pasado de frenada en una curva. Grosjean había sufrido una rotura de suspensión cuando iba séptimo. Ambos han abandonado sin consecuencias físicas.
Palou sale de Detroit con 273 puntos, 51 más que Ericsson, que es su principal perseguidor en el campeonato. Newgarden es tercero con 203 puntos, seguido por Dixon con 194 y O’Ward con 191.
La próxima cita de la IndyCar será el próximo fin de semana en Road America, donde Palou intentará seguir ampliando su ventaja y acercándose al sueño del título.